Este tapiz floral se realiza el segundo fin de semana de mayo desde 1982
El grupo municipal Ciudadanos ha registrado una moción para el Pleno ordinario del mes de mayo en la que solicita un reconocimiento expreso a una de las manifestaciones tradicionales, de entre las de carácter popular y religioso, más arraigadas en nuestro municipio, y en concreto en su pedanía de Desamparados: el Tapiz Floral del Santo de la Virgen que los habitantes de esta pedanía oriolana realizan y celebran anualmente cada segundo domingo del mes de mayo, con el objeto de que la misma, previos los trámites oportunos necesarios, sea declarada como Bien Inmaterial de Relevancia Local, al amparo de lo previsto en la Ley 4/1998, de 11 de junio, del Patrimonio Cultural Valenciano, en sus arts. 55 y ss., por entender que se trata de una expresión, más allá de su carácter religioso, popular y social, así como artístico.
José Aix, portavoz de Ciudadanos y vecino de Desamparados, afirma que “la Virgen de los Desamparados es el símbolo más importante que tenemos los parroquianos, como así lo demuestra nuestra historia”. Según se explica en la moción, entre 1779 y 1782 se reconstruye en la pedanía oriolana de Desamparados la antigua ermita existente, dándose nombre oficial a la partida rural a partir de fundarse eclesiásticamente como parroquia y recibir para el culto una imagen de la Virgen de los Desamparados. En ese momento comienza a celebrarse la “onomástica de la Virgen”, como se venía haciendo tradicionalmente en la costumbre valenciana, el segundo domingo de mayo. Sin embargo, al cabo de unos pocos años se decide trasladar el momento álgido de las fiestas en honor de la Virgen al mes de octubre, dado que los habitantes de Desamparados, en su práctica totalidad agricultores de cereal, no disponían normalmente en primavera de recursos económicos suficientes para las fiestas por no haber todavía recolectado y vendido sus cosechas. Así se decide pasar esas celebraciones religioso-populares en honor de la Virgen de los Desamparados ya a finales del siglo XVIII al tercer domingo de octubre, manteniéndose en mayo un acto tradicional que ha perdurado desde entonces de manera constante: “el santo de la Virgen” del segundo domingo de mayo.
Explica Aix que “inicialmente se cubría con una alfombra de hoja de álamo y flores el suelo frente a la iglesia (la tradicional “enramada” o “la enramá”) y se ‘rondaba’ a la Virgen por parte de los feligreses con instrumentos de cuerda y melodías y cánticos populares, generalmente jotas huertanas, en una tradición inalterada desde aquellos años finales del siglo XVIII hasta el año 1982, año en que se conmemoró el segundo centenario de la llegada de la imagen de la Virgen a la pedanía”. Fue en ese año, según expone el portavoz de la formación liberal, cuando se comienza con la elaboración de un tapiz de flores en el suelo de la fachada frontal de la iglesia, solicitándose a los vecinos que aportaran pétalos naturales de distintos colores, para disponerlos según la forma de un diseño previamente elaborado y marcado en el suelo. A partir de ese momento, de manera ininterrumpida, se elabora cada año el tapiz floral con el que Desamparados celebra “el santo de la Virgen” en la plaza del Obispo José Tormo de la pedanía.
Explica Aix que “esta moción no es solo un homenaje a la Patrona, lo es también a todos los hombres y mujeres del pueblo que participan y han participado durante tantos años en la original ‘enramá’, primero, y en el actual tapiz, en los últimos cuarenta y tres años; un reconocimiento al cariño y respeto por las generaciones anteriores que han forjado nuestra forma de ser, pensar y vivir, pero, sobre todo, una garantía de futuro para las futuras, a las que debemos implicar desde ya en la preservación de nuestras tradiciones”. De hecho, en la elaboración del tapiz participa una gran cantidad de vecinos, que aportan una enorme variedad de pétalos de flor, que se seleccionan y agrupan previamente por colores, para ser dispuestos de acuerdo a un diseño realizado antes sobre papel, que se traslada a escala al suelo frente a la fachada de la iglesia parroquial desde la mañana del sábado y comienza a ser cubierto por zonas y colores para conformar ese diseño, coincidiendo por la tarde con la ofrenda floral que tiene lugar desde mediados de los años 60 del pasado siglo. La labor de colocación de los pétalos de colores en sus zonas respectivas del dibujo, así como de vegetación verde suministrada por jardineros de la zona, se inicia por los propios vecinos de la pedanía, que debidamente coordinados participan y se emplean para tener el tapiz floral terminado antes de la medianoche del sábado al domingo, momento en que se abren las puertas del templo y se accede al mismo por parte de las rondallas que cantan a la Virgen, junto a la banda de música y los vecinos, produciéndose el alzado del bocaporte o lienzo que la cubre hasta ese momento al sonar el órgano de la iglesia. Tras estos actos se ofrece a todos los presentes en el exterior un chocolate con mona de manera desinteresada.
El tapiz que se conforma con los pétalos de colores y la vegetación cortada verde desde 1982 es, por tanto, la manera de continuar la antigua tradición de la enramada que los vecinos cubrían también con pétalos de flor inicialmente, pero sin darle forma definida. A partir de 1982 se hace según el diseño previo que se idea en los días anteriores a esta efeméride del segundo fin de semana de mayo. Así, también con pétalos de colores, se integra en el tapiz, en uno de sus laterales, el número de orden anual del mismo, siendo este 2025 el “43”, por haberse realizado desde 1982 hasta este año de manera ininterrumpida, durante 43 años.
Esta manifestación artístico-popular tiene un claro motivo y sentido religioso, pero al mismo tiempo es expresión de la identidad de los vecinos de Desamparados desde finales del siglo XVIII, y con la conformación de un tapiz floral previamente diseñado en formas y colores, desde 1982 hasta hoy. Se trata, por ello, de un acontecimiento de enorme tradición cultural y patrimonial de Orihuela, y en concreto de su pedanía de Desamparados, que viene heredada ya desde hace más de dos siglos de la tradición mariana seguida en Valencia capital ante la Virgen de los Desamparados.
Este grupo municipal, justifica Aix, considera por todo lo anterior que “el tapiz floral de la Virgen de los Desamparados que se elabora anualmente el segundo fin de semana de mayo en la pedanía de su nombre tiene una especial relevancia a efectos culturales, cuando menos de carácter local”, por lo que, debidamente informado el expediente correspondiente a tramitarse ante la Conselleria competente en materia de cultura (actualmente la Conselleria d’Educació, Cultura, Universitats i Ocupació de la Generalitat Valenciana), pudiera ser catalogado como Bien Inmaterial de Relevancia Local de acuerdo con lo previsto en los arts. 55 a 57 de la referida ley valenciana 4/1998, con los fines de su reconocimiento, su conservación y su difusión.
Por todo ello, avanza el portavoz de Ciudadanos, que “esperando contar con el apoyo del resto de grupos, vamos a instar a través del Pleno municipal al Gobierno local de Orihuela, y en concreto a su Concejalía de Cultura, la apertura y tramitación de expediente administrativo que recoja los testimonios e informes técnicos precisos y oportunos para presentar solicitud de catalogación e inscripción en la sección correspondiente (5ª) del Inventario General del Patrimonio Cultural Valenciano del tradicional Tapiz Floral del Santo de la Virgen, y que se dé cuenta al propio Pleno de los avances que se van produciendo al respecto”.


