Testigos afirman que en cuestión de 10 segundos el vendaval ha arramblado con todo a su paso
Una intensa y breve tormenta, acompañada de fuertes rachas de viento, ha causado importantes daños materiales esta tarde en la pedanía oriolana de Torremendo.
Según informan testigos presenciales, el fenómeno se produjo en cuestión de apenas diez segundos, tiempo suficiente para derribar árboles, una torre eléctrica, vallas, tejas, cornisas e incluso parte de un muro, dejando un rastro visible de destrucción en varios puntos del núcleo urbano.
Efectivos del Parque de Bomberos de Orihuela han tenido que intervenir para asegurar las zonas afectadas y retirar los elementos peligrosos caídos en la vía pública.
Algunos vecinos, apuntan a la posible formación de un tornado —un vórtice de aire y vapor de agua condensado que podría haber tocado tierra—, aunque este extremo está pendiente de confirmación por parte de las autoridades meteorológicas.
Afortunadamente, no se han registrado daños personales, algo que los propios vecinos han calificado de «milagroso» dadas las imágenes del suceso.


