La alcaldesa de Bigastro expone en las Cortes Valencianas las necesidades para no revivir las graves consecuencias de otra DANA

Publicidad

Belmonte: “es esencial y urgente para Bigastro que la Generalitat Valenciana actúe sobre la CV-95, para que deje de ser un dique que inunde el municipio, y que la Confederación Hidrográfica del Segura haga limpieza y dragado del fondo del Reguerón para que no se reduzca su capacidad de caudal y evitar su desbordamiento”

El Pleno de las Cortes Valencianas aprobó en su sesión de 23 de octubre de 2019 la Resolución 34/X, mediante la cual se acordó la creación de la Comisión especial de estudio de las medidas de prevención de los riesgos de inundaciones de la Vega Baja en materia territorial, urbanística e hídrica, se creó así la Comisión de estudio DANA-Vega Baja, a la que asistía en la tarde de ayer, miércoles 1 de julio, la alcaldesa de Bigastro, Teresa Mª Belmonte, acompañada del edil de Urbanismo, Antonio Meseguer.

La primera edil compareció en las Cortes Valencianas para exponer los daños sufridos y las necesidades que tiene Bigastro para no volver a revivir la catástrofe que otro episodio de fuertes lluvias ocasionaría el municipio, tanto para viviendas de sus vecinos como para infraestructuras municipales y sus espacios naturales, la huerta y el sector primario en la comarca.

Teresa Mª Belmonte expuso, por un lado, la problemática que tiene Bigastro ante fenómenos como la DANA, como es el dique que forma la CV-95 sobre la localidad, estando elevado en algunas zonas casi dos metros sobre las calles y, por otro, la falta de mantenimiento y limpieza de la Azarbe Mayor (Reguerón), reduciendo su capacidad de caudal y, por tanto, el drenaje de las aguas pluviales que provienen del municipio.

Al respecto del Reguerón, Belmonte ha expuesto que es necesaria la actuación de limpieza por parte de la Confederación Hidrográfica del Segura (CHS), pero que si no tiene capacidad para llevar a cabo este tipo de actuaciones, que delegue la competencia, porque es una cuestión que afecta a muchos municipios de la Vega Baja, y que en episodios como la DANA de 2019, de estar limpia esta red natural, se hubiesen evitado muchos daños valorados en cientos de millones de euros.

La alcaldesa también explicó que Bigastro, desde el 2015, tras la toma de posesión de su equipo de gobierno, llevó a cabo la redacción de un Plan Director de Inundabilidad sobre el municipio, el cual supone una inversión de más de 13 millones de euros. Manifestó que desde su redacción, se están haciendo actuaciones conforme a dicho plan, con apoyo de la Diputación de Alicante, y que en el 2018 el Ayuntamiento ya solicitó a la Consellería de Medioambiente, concretamente, a la Dirección General de Aguas, ayudas para poder llevar a cabo su desarrollo sobre las que aún no se ha obtenido respuesta.

Belmonte señaló en la sede de las Cortes que “no tienen sentido estar pagando una y otra vez indemnizaciones por parte del Consorcio de Compensación de Seguros y subvenciones de todas las administraciones por daños. Hay que desarrollar un plan de inversiones en infraestructuras eficaz e inmediato financiado por el Gobierno de España y la GVA. Si los cientos de millones de euros pagados en indemnizaciones y ayudas se hubiesen invertido en infraestructuras desde el episodio de inundaciones del 2016, se podría haber evitado en gran parte la catástrofe de DANA 2019, que tanto daño ha hecho a la población de la comarca”, añadiendo que “la inversión que se requiere en nuestro municipio no es ni de un 10% de las indemnizaciones que se pagan por los daños materiales que ocasionan las fuertes lluvias”. La primera edil ha vuelto a reivindicar que se presupueste el proyecto elaborado para dar solución a los problemas que genera, en este sentido, la CV-95, “estamos en julio y el temor de la llegada de la época de lluvias es latente entre los vecinos, que reclaman con desesperación una solución a su ayuntamiento. Y su ayuntamiento no puede darles una respuesta por falta de competencia administrativa sobre las infraestructuras que les provocan tantos daños, la CV-95 de competencia de la GVA, y el Azarbe Mayor, de competencia del Ministerio de Medioambiente.”

La alcaldesa recreó la situación vivida durante septiembre de 2019 tras la DANA, con más de 700 familias en Bigastro afectadas, que a día de hoy no han terminado de recibir las ayudas prometidas por el gobierno regional y el de la nación. Un episodio excepcional, sin duda, pero destacó que “con lluvias de más de 100 litros por metro cuadrado a la hora se generan problemas de inundaciones, por lo que urge una solución inmediata”.

Sé el primero en comentar

Deja tu comentario

Tu dirección de correo no será publicada.


*