Según se rumorea, un concejal de la oposición del Ayuntamiento de Orihuela, va comentando por ahí que lo que se ha visto del vídeo de Olmeda sobre la compra de puestos del mercado, es solo una parte. Dice que aún quedan 30 ó 40 minutos de grabación por ver la luz, y que se harán públicos cuando proceda. No sabemos si dicho concejal pertenece a uno de los partidos de la oposición o a lo que queda del otro, si es que queda algo.
Si el rumor fuera cierto, y todavía nos quedaran por escuchar cosas sobre presuntas ventas ilegales de puestos en el mercadillo, podríamos sacar un par de conclusiones :
PRIMERA : Si los mercaderes denunciantes no hubieran entregado el vídeo completo en el juzgado, sería lícito entender que la justicia les importa un pimiento. Cuando alguien tiene un dossier que documenta un delito, no se va al juzgado y entrega tres folios para ir entregando el resto como si fuera una enciclopedia por fascículos. Entrega todas las pruebas para que la justicia tome las medidas oportunas. Si lo pensaran entregar por partes, pudiera ser que fueran simples peones de una oposición que lo único que pretende es torpedear al equipo de gobierno.
SEGUNDA : Si los concejales de la oposición, supieran que parte del vídeo no se ha hecho público, sería porque seguramente lo habrían visto. Igual pudiera ser que supieran más del tema de lo que parece en un principio. Este tema solo podría servirles para lo único que les queda, embarrar. Lo más probable es que los juzgados se pronuncien sobre la decisión de la mesa de edad el día que le concedan a Madrid los juegos olímpicos. Se ven condenados a permanecer en la oposición hasta el final de la legislatura y necesitan con urgencia volver al poder. Por tanto, lo único que les queda por hacer es intentar que la población piense que todos los políticos son iguales. De esa manera el votante progresista se quedará en casa sin votar, y los suyos que votan siempre pase lo que pase, les harán ganar las elecciones.
Por todo lo anterior, es por lo que tenemos que soportar el bochornoso espectáculo de que una señora procesada por prevaricación, malversación y falsedad en documento público, le diga al sr. Gallud que debe dimitir por el bien de Orihuela. Y lo hace sin rubor y sin vergüenza. Claro que lo que nunca se tuvo no puede adquirirse de repente por ciencia infusa. Igual debería mirar debajo de su asiento por si es ella la que tiene la famosa cola que la mantiene pegada al asiento, y no el alcalde tal y como ella afirma.
Y ojito, que al concejal de mercados se le está despellejando públicamente por unas declaraciones de un señor en un vídeo con cámara oculta. Debemos destacar que esas son declaraciones de ese señor, única y exclusivamente. Además el mismo declara en el vídeo: “Manolo, no sabe nada”. Sin embargo, rápidamente, se pone en duda la honorabilidad del concejal.
Lo que está claro es que, a pesar de que la gestión sobre la ubicación de los mercadillos haya sido mejor o peor, que haya contentado a unos y disgustado a otros, Los Verdes ponemos, no solo una mano en el fuego por la honradez de Manuel Gallud, sino las dos a la vez. En la bancada de enfrente no pueden decir lo mismo. Ni siquiera la diablesa pondría un dedo en el fuego por ninguno de ellos.
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