El conjunto de la Vega Baja se coloca colíder de grupo junto al CBM Elche
Tras una pretemporada intensa, los chicos del balonmano Almoradí se presentaban con muchas ganas e ilusiones en su debut y en casa ante la fiel afición. Los nervios almoradidenses se dejaron notar durante los primeros minutos del encuentro, los errores de lanzamiento y pases llevaron a los locales a ir detrás en el marcador hasta el minuto 8 cuando los de la Vega Baja mutaron hasta convertirse en un auténtico rodillo para los ibicencos.
Un buen juego en equipo en ataque, con movimiento de balón fluido y excepcionales lanzamientos originó que los de la Vega Baja se fueran poco a poco marchando en el marcador. Tanto fue así que al descanso la diferencia se situó en más ocho, diferencia que traducía lo que estaba pasando en la pista: arrollador Almoradí, ineficaz Ibiza.
La segunda mitad se presentaba con buena perspectiva para el Almoradí, con un marcador de 17 a 9, quedaba saber si los isleños reaccionarían, pero nada más lejos de la realidad. Una defensa férrea e infranqueable hacía que los visitantes chocaran una y otra vez contra ella, mientras tanto los almoradidenses seguían batiendo al meta Carreño una y otra vez y por todos los ángulos.
A falta de quince minutos, el electrónico marcaba una diferencia de más 15 goles, algo que aprovechó el entrenador local para realizar rotaciones y dar descanso a los más habituales.
En el tramo final del encuentro los locales bajaron el ritmo y los de la isla pudieron maquillar un poco el marcador, aunque seguían estrellándose contra la defensa y la portería local. Fue en esos últimos instantes cuando el encuentro entró en la dinámica de muchas interrupciones para secado de pista y protestas, lo que condujo a una disolución del espectáculo.
Solo el último gol, casi sobre la bocina, despertó el aplauso de los aficionados en un lanzamiento que quitó las telarañas de la portería ibicenca, por parte de Pedro Quesada, dejando el electrónico en un 29-20. Del encuentro, cabe destacar la gran actuación de todo el equipo y de Rubén Ruiz, máximo anotador con 12 tantos.
Con este resultado en la primera jornada, el Almoradí se coloca colíder con el balonmano Elche.
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