Alumnos, profesores y espectadores vieron arder la falla después de que los falleros mayores indultaran un ninot
El mismo día en el que se cumplían 108 años de que se quemó la primera falla en Orihuela, el colegio de Hurchillo celebró la quema de la falla que durante unos días ha presidido el patio de este centro escolar que un año más ha decidido revivir la tradición fallera, ya extinta, del municipio. Como mandan los cánones, el fuego consumió ayer por la tarde la falla plantada por los profesores del centro y que era una imitación a la que se instaló en Orihuela en el año 1934.
Antes, los falleros mayores de este 2014, Jorge Insa y Aitana Lorente, indultaron uno de los ninots que formará parte del futuro Museo Fallero que albergará a todos los muñecos que no han sido pasto de las llamas.
Este acto contó con la presencia de unas 500 personas en el centro escolar que también pudieron contemplar el castillo de fuegos artificiales a los sones del himno regional valenciano tras las quema de la falla.
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