Además, la reputación sigue creciendo en el plano nacional, debido al interés que suscitan muchos de sus municipios
La Vega Baja del Segura afronta con optimismo un 2024 cargado de retos, pero también de oportunidades para una región costera que sigue ganando peso con el paso del tiempo. Su situación geográfica y sus condiciones climáticas suponen una ventaja competitiva importante, pero también el desarrollo social y económico que ha experimentado en esta última década.
La Vega Baja sirve como puente de unión entre la provincia de Alicante y la Región de Murcia. Esta zona se ha ganado a pulso el reconocimiento del turismo internacional a nivel continental, gracias a la constante llegada de visitantes procedentes de Reino Unido, Francia o Suecia.
Además, la reputación sigue creciendo en el plano nacional, debido al interés que suscitan municipios como Orihuela, Torrevieja, Almoradí, etc. El sol y la playa se mantienen como un elemento diferencial, pero una apuesta decidida por la diversificación ha aumentado la oferta gastronómica, las opciones deportivas o el ocio.
Por otro lado, el buen tiempo permite romper con la estacionalidad de las temporadas turísticas, algo que también influye en la diversificación turística. El verano se mantiene como el mejor momento para visitar la región, pero las cifras aumentan de forma constante durante el resto de los meses.
Turismo y diversificación como eje central
Esta apuesta por el turismo y la diversificación de la industria es un eje central que afecta a toda la provincia. El sector público y las iniciativas privadas llevan muchos años colaborando en este sentido, algo que se traduce en resultados tangibles.
Por ejemplo, los últimos datos ofrecidos por la APHA (Asociación Provincial de Hoteles y Alojamientos Turísticos de Alicante) corroboran un récord de ocupación en enero de 2024. La tasa prácticamente se ha duplicado en una década, ya que ha pasado del 30 % en 2013 al 58 % este año, mientras que municipios de la Vega Baja como Orihuela o Guardamar del Segura se colocan como referentes alicantinos.
Tecnología, innovación y redes
Uno de los apartados diferenciales de la Vega Baja como región pionera en la diversificación tiene que ver con la inversión en tecnología, innovación y redes de comunicación. La expansión de Internet por todos sus municipios o la decidida apuesta por el 5G supone un aliciente más para los turistas, pero también impulsa el desarrollo de las empresas locales.
Esta situación mejora la oferta de servicios, pero también se traduce en mayores comodidades para los ciudadanos y los visitantes. La Vega Baja del Segura ofrece una conectividad prácticamente perfecta en todos sus rincones y todas sus empresas han realizado un esfuerzo importante para ofrecer servicios tecnológicos de forma transversal.
Este tipo de cambios influyen en la cantidad de reservas hoteleras, las buenas críticas para la restauración, el impulso de actividades deportivas relacionadas con el turismo o el ocio digital. Todos estos factores son fundamentales para captar turismo en un entorno altamente competitivo y donde aspectos como la comodidad o la conectividad se convierten en elementos diferenciadores.
La posibilidad de disfrutar de preciosos parajes naturales, una rica gastronomía o un amplio abanico de oferta cultural es imprescindible. Sin embargo, la experiencia de los viajeros mejora considerablemente si a todo esto le sumamos la posibilidad de disfrutar del ocio online desde cualquier dispositivo y cualquier rincón de la región.
Este espectro del entretenimiento abarca desde la música de Spotify, las películas de Netflix o los juegos de azar de BonusFinder España, que se convierten en un aliciente más para los viajeros gracias a la infraestructura digital que se ha creado en la región. La capacidad para combinar todas estas ventajas competitivas supone un valor fundamental, ya que el ocio diario se traslada también a nuestros viajes y se mejora con las posibilidades naturales, gastronómicas o culturales de la Vega Baja.
Inversión social y empresarial
Finalmente, merece la pena destacar que todo este proceso sería impensable sin la imponente inversión social y empresarial que recibe la región. Los fondos públicos son importantes y prioritarios, pero el sector privado también está acertando con su toma de decisiones.
Este camino representa una parte de la ambición de Alicante para recuperar su hegemonía como una de las provincias más importantes de España. Los resultados se observan en distintos baremos como la natalidad, el PIB, la diversidad productiva o la sostenibilidad como una apuesta de crecimiento futura.
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