Los populares consideran «desafortunado e inapropiado» que la formación de izquierdas haya propiciado que se escuche el nombre de Orihuela a nivel nacional por un acontecimiento que no es más que la recreación de un hecho histórico»
El Grupo Popular en el Ayuntamiento de Orihuela denuncia que el Grupo Cambiemos, una vez que ha causado el mayor daño posible tanto a personas como a instituciones y al prestigio de nuestra ciudad, algo que no ocurre por primera vez, retira la moción que había presentado para debatir en el próximo pleno ordinario que se celebrará pasado mañana, jueves, día 28, en el que proponían la condena al boato del embajador Moro 2022, calificándola de racista.
Los populares ponen de manifiesto la verdadera razón por la que han retirado la moción, que no es otra que evitar que la alcaldesa Carolina Gracia, el Grupo Ciudadanos y ellos mismos, vuelvan a hacer declaraciones sobre el acto y, por tanto, dar el asunto por zanjado para que no se vuelva a abrir la polémica y minimizar el coste de imagen que las declaraciones de unos y de otros han producido en la sociedad oriolana, independientemente de si gustó más o menos a la ciudadanía esta expresión artística.
Para Mariola Rocamora, concejala del Grupo Popular, “ha sido desafortunado e inapropiado escuchar el nombre de Orihuela en medios de comunicación nacionales durante toda una semana por un acontecimiento que no es más que la recreación de un hecho histórico puesto en escena en las calles de Orihuela. Es bochornoso que un grupo político municipal, Cambiemos Orihuela, de escasa o nula participación en la Fiesta, critique y lapide años de esfuerzo de la promoción turística y festiva de las fiestas de Orihuela, sin conocimiento de lo que una embajada y su boato lleva consigo”.
Continúa recordando Rocamora la intencionalidad con la que han querido trasladar a la ciudadanía en general la imagen de racismo y xenofobia en un acto que en ningún momento se ha visto reflejado en la embajada mora. Además, el hecho escenifica una época real, no olvidemos que es pasado. “¿Acaso es racismo y xenofobia que un empresario agricultor contrate para recoger la cosecha de limones o para plantar brócoli, a una cuadrilla de inmigrantes subsaharianos siendo el único “blanco” el que paga los salarios? Es muy triste que se esté trabajando para que las fiestas de Moros y Cristianos de Orihuela sean declaradas de Interés Turístico Internacional y ello se vea ensombrecido por calificaciones partidistas y nada bien intencionadas …”.
La cuestión es que el daño ya se ha producido y toca pedir responsabilidades de todo tipo. En el juzgado por si se ha podido cometer algún delito por injurias o por odio, e incluso, responsabilidad política, por haber situado a Orihuela en el centro de atención de los programas sensacionalistas y que han trasladado a sus audiencias una imagen totalmente sectaria y distorsionada de la realidad.
Carolina Gracia y el resto de los grupos no deben dejar pasar este hecho como si no hubiese ocurrido y tienen que decir qué medidas piensan adoptar en un futuro inmediato para contrarrestar esta mancha que los de la coalición de la extrema izquierda oriolana ha vertido sobre la ciudad.
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