Almoradí hace balance de un año en el que han tenido que hacer frente a la DANA y la pandemia

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Desde el equipo de gobierno han recordado las medidas e inversiones que se han ido poniendo en marcha para tratar de frenar los efectos de la crisis sanitaria y trata de devolver la normalidad a un territorio golpeado por una catástrofe natural

Un año difícil, en el que el equipo de gobierno del Ayuntamiento de Almoradí ha tenido que hacer frente, tanto a los daños provocados por la DANA como a las consecuencias de la Covid-19. Una pandemia que sigue golpeando muy duro y que llevó -a principios de abril- a la puesta en marcha de un Plan de Reactivación Económica con el fin de ayudar al tejido económico y comercial del municipio.
Entre otras medidas -ya cumplidas- se eliminaron tasas municipales así como las de mesas y sillas y las del mercado semanal. También se establecieron subvenciones directas por importe de unos 400.000€ a autónomos y pequeños empresarios y se creó una línea de ayudas para compensar las licencias de obras de las viviendas afectadas por la Dana. La emergencia social provocada ha sido una prioridad desde el minuto uno, por lo que se ha incrementado sustancialmente tanto la atención de cuidados a mayores cómo la psicológica a personas que han sufrido. Del mismo modo, se ha incrementado el voluntariado y el reparto a domicilio de alimentos a personas confinadas.

Las campañas de apoyo al pequeño comercio y a la hostelería han sido constantes, del mismo modo que se ha puesto en marcha el proyecto “Almoradí Emplea y Emprende” con vistas a apoyar el empleo, el talento local y el emprendimiento. Por último, ya es una realidad el Plan Estratégico  de Almoradí -basado en Objetivos de Desarrollo Sostenible y presentado la pasada semana-  que va a permitir a la localidad adelantarse a cualquier eventualidad y marcar el futuro desarrollo de la localidad.

En cuanto a las ayudas por la catástrofe vivida en el municipio en 2019, la localidad ha conseguido la mayor subvención de toda la Vega Baja, lo que va a suponer una inversión histórica superior a los DIEZ MILLONES  de euros, lo que va a permitir importantes actuaciones de mejora en infraestructuras dañadas y en obras de prevención para el futuro.

Los sucesos acontecidos en Almoradí en apenas un año han puesto a prueba la capacidad de adaptación y recuperación del municipio, cuya estrategia de futuro se basa en la innovación y el desarrollo de los sectores industriales y  agroalimentarios, así cómo en el turismo y el comercio urbano. Una vuelta a la normalidad que poco a poco se conseguirá gracias al esfuerzo, la confianza y el apoyo de todos en estos tiempos difíciles.

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