Los arrestados accedían a las viviendas de madrugada y en domicilios estudiados previamente, a los cuales les colocaban señuelos para verificar que los domicilios se encontraban vacíos y así poder perpetrar el robo sin ser descubiertos
Agentes de la Policía Nacional de la Comisaría Local de Elche y de la Jefatura Superior de Murcia, en un operativo conjunto han detenido a cuatro varones, de edades comprendidas entre 37 y 59 años, todos ellos de nacionalidad Georgiana, pertenecientes a un grupo criminal especializado supuestamente en robos en vivienda.
El operativo fue iniciado meses atrás, coordinado entre los grupos de Policía Judicial de Elche y Murcia, quienes centraron la investigación sobre varias personas de origen Georgiano que podrían estar llevando a cabo actividades delictivas, concretamente robos con fuerza en viviendas habitadas.
Tras meses de gestiones y vigilancias discretas realizadas sobre los investigados los agentes tuvieron que emplearse a fondo para no ser descubiertos ya que este grupo tomaba grandes medidas de seguridad en todos sus movimientos, con el objetivo de detectar la presencia policial. Con estas observaciones, se identificaron a cuatro personas quienes realizaban diferentes funciones dentro de la organización, desde vigilancias del entorno, pasando a funciones de marcación de puertas y especialistas en fracturarlas para acceder a las viviendas.
El «modus operandi» utilizado, marcar las viviendas con pequeños señuelos ocultos en las puertas
Estas personas se trasladaban a los barrios donde querían efectuar el ilícito penal, minuciosamente estudiaban la zona, marcaban las puertas de entrada de las viviendas, utilizando pequeños fragmentos de plásticos transparentes, que a simple vista no se visualizaban y pasaban desapercibidos.
Al paso de los días, nuevamente este grupo se trasladaba al lugar de los inmuebles previamente marcados, para comprobar los señuelos establecidos, si estos se encontraban intactos, era señal de que las viviendas estaban vacías y de que sus moradores no habían accedido a sus domicilios, muy probablemente por encontrarse disfrutando de sus vacaciones. Con toda la información recabada, volverían el día señalado para cometer el robo en la vivienda elegida.
En vista de que los sospechosos podrían estar operando en lugares de mayor incidencia delictiva se diseño un dispositivo de prevención y vigilancia en aquellos edificios que la policía esperaba que inminentemente pudieran actuar sobre las viviendas marcadas.
Efectivamente, al anochecer, los cuatro varones a bordo de dos vehículos, se trasladaron desde la localidad de Torrevieja (Alicante) hacia la ciudad de Elche, lugar elegido donde se encontraban las viviendas marcadas. Tras adoptar sus correspondientes medidas de seguridad, sobre las 2 de la madrugada, accedieron al interior de varios inmuebles, utilizando técnicas especializadas en el manejo de ganzúas y otras herramientas utilizadas para forzar bombines o cerraduras de puertas.
El operativo culminó con el arresto de todo el grupo criminal, cuando estas personas fueron sorprendidas in fraganti, al pretender abandonar uno de los inmuebles donde habían perpetrado su planificado robo gracias a la respuesta rápida y eficaz de los agentes que participaron en él.
A los detenidos le fueron intervenidas mochilas que contenían diversas herramientas que utilizaban supuestamente para la apertura de las cerraduras de los domicilios y también le fueron intervenidos objetos y dinero que supuestamente acababan de sustraer (dinero, joyas, relojes, etc).
Todos los arrestados fueron puestos a disposición del Juzgado de Instrucción en funciones de Guardia de Elche, decretando su inmediato ingreso en prisión.
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