Para la vicesecretaria general Antonia Moreno la exalcaldesa de Orihuela es un «claro ejemplo de lo difuminada que es la ‘línea roja’ del presidente de la Generalitat Alberto Fabra»
La vicesecretaria general del PSPV-PSOE de la Vega Baja, Antonia Moreno, ha exigido a la presidenta de la Diputación de Alicante, Luisa Pastor, la “adopción de medidas” contra la diputada y exalcaldesa de Orihuela, Mónica Lorente, a raíz de su nueva imputación por un presunto delito por tráfico de influencias en el ‘caso Brugal’.
Para los socialistas de la comarca, Lorente es un “claro ejemplo de los difuminada que es la ‘línea roja’ del presidente de la Generalitat Valenciana, Alberto Fabra, y la contundencia de José Císcar a la hora de afrontar con decisiones lo que pregonan a favor de la ejemplaridad de los cargos públicos”.
Concretamente, Lorente ha sido imputada por la adjudicación del Plan Zonal XVII de las basuras a la UTE Cespa-Ortiz cuyo representante, el empresario alicantino Enrique Ortiz, fue detenido en junio del año 2010 junto al entonces presidente de la Institución provincial José Joaquín Ripoll.
Desde el PSOE han recordado que, en ese momento, Lorente era vicepresidenta y portavoz de la Diputación de Alicante y, su imputación, ha sido ratificada por la juez al “existir indicios de que conocía, con once meses de antelación, la modificación de la ubicación definitiva de la planta a los terrenos del empresario oriolano Ángel Fenoll, también encausado por el mismo asunto”.
Esta nueva imputación se suma a otras dos anteriores, siendo la primera de ellas la adjudicación de la remodelación de una plaza en Orihuela, al parecer, “meses después de su inauguración” y, la segunda, por presunto fraude en la adjudicación del servicio de recogida de residuos urbanos a Fenoll.
“En total, Lorente suma la presunta comisión de varios delitos entre los que se encuentran prevaricación, fraude, tráfico de influencias y negociaciones prohibidas a funcionarios”, ha dicho Moreno, para quien es “inconcebible que la presidenta siga compartiendo bancada y tolerando la presencia de personas cuyas conductas deterioran tanto las siglas de su partido como la imagen de las instituciones a las que representan”.
Por todo ello, la vicesecretaria general del PSOE ha exigido la “reacción” de Luisa Pastor al considerar que “no puede dar cobijo y no expulsar a Mónica Lorente del grupo popular mientras las direcciones provincial y regional presumen a diario de apartar a los imputados de las instituciones”.
«Está en manos de la presidenta excluir del PP a la diputada Lorente ya que tiene mayoría para hacerlo y, su indiferencia y falta de reacción, solo confirma que la lucha del PP contra la corrupción es una pantomima de la que todos los ciudadanos son más conscientes cada día», ha concluido Moreno.
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