El ‘Ciudad de Oviedo’ vuelve a la calle para defender el centro

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El alcalde manifestó su apoyo al centro pero evitó el compromiso exigido por los padres que aseguran que una comunidad escolar no es una “cuestión de números”

Cerca de 200 personas se dieron cita en la Plaza de la Constitución para exigir que el CEIP Ciudad de Oviedo no se cierre. Padres, alumnos, profesores y ciudadanos de Torrevieja que dan su apoyo a esta comunidad educativa se manifestaron recorriendo las calles que separan este centro escolar, ubicado en la urbanización ‘Las Torretas’,  del Ayuntamiento de Torrevieja, frente al que se concentraron para demostrar que no se van a quedar de brazos cruzados ante el anunciado cierre de este centro escolar.

P1016793Además de la comunidad educativa la concentración contó con la presencia de concejales de la oposición José Hurtado, Javier Manzanares y Domingo Pérez, el coordinador local de IU, Víctor Ferrández, y del alcalde de Torrevieja, Eduardo Dolón, acompañado por la edil de educación Rosario Martinez Chazarra, que se se mantuvieron un tanto alejados de la concentración hasta que fueron invitados por los representantes de los padres a escuchar a la comunidad escolar y responder a sus preguntas. Dolón, que manifestó su apoyo a la comunidad escolar y aseguró que está a la espera de una contestación de Consellería respecto a las alegaciones presentadas, evitó asumir compromisos mayores tal  como demandaban algunos de los presentes.  

La comunidad escolar del centro anuncia que seguirá con las movilizaciones y que no “bajará los brazos” ante una decisión que consideran injusta, basada sólo en números y no en la realidad de toda las personas que forman esta comunidad escolar a la que catalogan como un ejemplo de integración. En el manifiesto leído por la portavoz de los padres, Rosa Sáez Martinez, se hace especial hincapié en que la desaparición de este centro educativo “supone dejar al barrio sin colegio”  y una masificación de los demás centros de Torrevieja que sólo empeorará la calidad educativa de los alumnos además del evidente efecto de desarraigo que sufrirán los niños  y niñas del colegio al ser separados de sus amigos, profesores y centro educativo en el que muchos han cursado toda su escolarización. 

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