La rotura en los Tubos del Trasvase provoca la pérdida de miles de litros de agua en Orihuela

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La fuga deja dos carreteras cortadas y bancales anegados en las inmediaciones del Trasvase del Río Segura

La rotura de una caseta de motor de riego anexa al río Segura, y propiedad de la Confederación Hidrográfica del Segura (CHS), provocó ayer la pérdida de miles de litros de agua en Orihuela. Campos anegados, carreteras cortadas y vecinos desalojados fue el balance que dejó la avería.

En concreto, se rompió una caseta de motor de riego ubicada en la carretera de los tubos del Trasvase. La rotura se produjo al parecer tras caer una pieza sobre una de las válvulas, que se rompió y comenzó a salir el agua a borbotones. En Arneva uno de los tubos del Trasvase no aguantó la presión y estalló provocando la pérdida de una gran cantidad de agua que sirve para el riego de los campos de la Vega Baja y la Región de Murcia.

La primera rotura se produjo a las 15.45 horas de la tarde del domingo en el kilómetro 3 de la CV-925 -en la conocida como carretera de los tubos.  La Policía Local y la Guardia Civil de Jacarilla tuvieron que cortar al tráfico esta vía que conecta las pedanías de Desamparados y Arneva por riesgo de inundación. La vía quedó totalmente inundada por lo que era imposible transitarla. La rotura dejó bancales anegados por completo y la carretera completamente inundada.

Efectivos del Parque de Bomberos de Orihuela trató en un primer momento taponar la avería pero fue imposible por la cantidad de agua y la presión a la que salía. Fue la Confederación Hidrográfica del Segura la que dio orden de cortar el suministro «para evitar grandes pérdidas de agua» aunque, vista la estampa, no se logró.

Los bomberos tuvieron que desalojar tres chalets en la pedanía de Arneva por riesgo de inundación. En total fueron evacuadas cuatro personas. Tres han abandonado sus viviendas por su propio pie mientras que una persona tuvo que ser desalojada por los bomberos porque tenía miedo de salir de la vivienda ante la cantidad de agua que tenía en la puerta de su vivienda.

El agua derramada fue desviada al cauce del Segura y a un embalse próximo para achicar los huertos inundados. Ayer por la tarde ya era visible la subida del caudal en el río.

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