El Colegio Santo Domingo, fundado por Loazes, inaugura su aula-museística para poner en valor el patrimonio de su edificio
Orihuela ha recordado hoy a uno de sus hijos más ilustres cuando se cumplen 450 años de su fallecimiento. El Arzobispo Fernando de Loazes, es una de las figuras claves de la cultura oriolana. Y desde la ciudad que lo vio nacer en 1497, junto a la parroquia Santas Justas y Rufina, se le ha rendido tributo por parte de autoridades eclesiásticas, municipales, miembros del Patronato Histórico-Artístico y de la sociedad civil del municipio.
El lugar escogido para el acto memorial no podía ser otro que el Colegio Diocesano Santo Domingo. Un edificio que mandó construir el propio Fernando de Loazes en los terrenos en los que anteriormente se asentaba el monasterio de la Virgen de Socorro, con la intención de fundar una institución educativa que llegara a ser universidad.
El Colegio Santo Domingo se ha volcado en este acto para recordar a su fundador, al que siempre tienen presente puesto que una escultura enclavada en el claustro recuerda la importancia de su figura.
El acto ha comenzado con un acto de oración al que han asistido los alumnos, profesores del centro así como las autoridades. Posteriormente los escolares han realizado una ofrenda floral en el monumento del Arzobispo en el claustro.
El plato fuerte de la jornada ha sido la inauguración del Aula-Museística que el centro ha impulsado para “desplegar el valor de nuestro edificio patrimonio que está reconocido como Bien de Interés Cultural (BIC)”, ha expresado el director del colegio, José María Fernández.
Se trata de un aula de acogida a visitantes, y que servirá también como proyecto formador para los alumnos. Contiene una exposición de las piezas más significativas como por ejemplo el collar del Rector de la Universidad (Siglo XVIII), una antigua columna del antiguo claustro o un título académico universitario también del siglo XVIII. El museo cuenta también con varios paneles en español, valenciano e inglés que relatan la cronología del edificio y la institución educativa a través de los siglos.
El proyecto ha sido llevado a cabo desde la Dirección titular del centro con el visto bueno de la Dirección Patrimonial de Turismo de la Generalitat Valenciana.
“El Arzobispo Fernando de Loazes sigue muy vivo en el recuerdo de Orihuela y de este colegio”, ha indicado el obispo de la Diócesis, Jesús Murgui, quien ha indicado que “es una puerta al futuro que abrimos para mostrar más sobre esta joya que es Santo Domingo”.
Esta nueva aula se enmarca dentro de un proyecto iniciado en 2013 por el Colegio Diocesano Santo Domingo. Un año después se inauguró la tienda de suvenirs, que cuenta con la certificación de calidad del SICTED. Ahora se inaugura este nuevo proyecto y el próximo objetivo, ha explicado el director, es la inminente recuperación del Refectorio histórico, que se llevara próximamente ante la Conselleria.
Todas estas acciones tienen como objetivo poner en valor el patrimonio cultural, educativo y artístico así como promover la visita turística cualificada al colegio, que es a su vez el mayor monumento BIC de la Comunidad Valenciana.
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